“Por una niñez en paz” Parroquia de San Jerónimo, Comayagua

Con el lema: “Por una niñez en paz”, en consonancia con el tema que se ha trabajado a lo largo del año desde la Comisión Nacional de Pastoral  y aprovechando la semana de receso académico de los niños, se desarrolló un campeonato de futbolito en la sede parroquial de San Jerónimo, Diócesis de Comayagua.

El evento fue organizado por el Consejo de Pastoral  con el apoyo de los señores Olvin Bonilla (maestro del Instituto Republica de Honduras)  y Marvin Marcia (Vice Alcalde de la Corporación Municipal) y el patrocinio de familias, personas,  casas comerciales y la Alcaldía Municipal. Participaron  seis equipos en la categoría menor (8 a 12 años) y  seis equipos en la categoría mayor  (13 a 15 años).

El campeonato se inauguró el Lunes 14 con un desfile desde el atrio del templo parroquial recorriendo las principales calles de la comunidad hasta la canchita ubicada  a las afueras del pueblo salida a Comayagua   -propiedad del señor Neri Barrera, quien la rentó por horas a medio precio-

Dentro del  acto de inauguración se hizo una oración y se entonó el Himno Nacional, para reforzar o rescatar el amor al Señor y el respeto a la patria.

Desde el lunes 14 hasta el sábado 19, a partir de las 3:00 p.m. se dieron cita en la canchita, más de 125  niños, inscritos en los equipos, amigos y familiares que les apoyaron en todo momento.

El objetivo era transmitir a través del deporte, la certeza que se puede vivir, jugar trabajar, estudiar en paz y en armonía con todos y destacar el valor de la “no exclusión. También fue una valiosa oportunidad para evangelizar por medio de música, mensajes,  textos bíblicos y consejos.

El sábado 19, después de los partidos del día se realizó la entrega de medallas a todos los participantes pues en el trabajo por la paz todos debemos ser campeones. No se entregó trofeo ni se declaró ganador a nadie para no fomentar la rivalidad  y promover la hermandad y el compañerismo.

A partir de esta hermosa experiencia, el Consejo de Pastoral de la sede parroquial junto a su párroco P. Esteban Fuentes, consideran que este evento debe realizarse todos los años en la semana de receso y darle seguimiento los niños y niñas que participaron.

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