Mensaje: Cuaresma (2013)

“Hemos conocido el amor que Dios nos tiene, y hemos creído en él” (1 Jn 4, 16)

Reunidos en Asamblea Ordinaria, los Obispos de la Conferencia Episcopal de Honduras nos dirigimos a todos los fieles y a todas las personas de buena voluntad al comienzo del tiempo litúrgico de la Cuaresma.

Inspirándonos en el Éxodo que liberó al pueblo de Israel de la esclavitud, hemos iniciado el camino de la Cuaresma siguiendo a Cristo. Él, impulsado por el Espíritu, venció la tentación y ahora nos fortalece y nos da ejemplo para que podamos llegar a la Pascua, que es su victoria sobre el pecado y la muerte.

Cuaresma es camino de conversión que nos invita a enderezar la dirección de nuestra vida. Cuaresma es camino de reconciliación para rehacer la comunión con Dios y con los demás. Cuaresma es camino de liberación para ponerlo todo en las manos del Señor que nos hace libres.

El Papa Benedicto XVI nos exhorta a vivir la Cuaresma como oportunidad de profundizar en la relación indisoluble que existe entre la Fe y la Caridad. Vivir la FE como respuesta al Amor de Dios y la Caridad como vida en la FE. En el contexto del Año de la FE, y con ocasión del Mensaje para la Cuaresma del 2013, el Papa escribe:

“El cristiano es una persona conquistada por el amor de Cristo y, movido por este amor, está abierto de modo más profundo y concreto al amor al prójimo. Esta actitud nace ante todo de la conciencia de que el Señor nos ama, nos perdona, incluso nos sirve, se inclina a lavar los pies de los apóstoles y se entrega a sí mismo en la cruz para atraer a la humanidad al amor de Dios”.

Testigo singular de este camino de Fe y Caridad es el Papa Benedicto XVI. Tras un largo camino de servicio al Señor y a la humanidad desde la Iglesia, y después de ejercer durante ocho años el ministerio que Jesús le confió al apóstol Pedro, el Papa ha decidido renunciar a este ministerio. Sintiéndose sin fuerzas físicas para una labor tan exigente, ha decidido dejar la carga en manos del Señor con la confianza de que el Espíritu suscitará a otro “pescador de hombres” digno de suceder al apóstol Pedro. No ha renunciado por miedo a algún peligro sino porque reconoce, humilde y serenamente, las limitaciones físicas propias de sus 85 años de edad.

Benedicto XVI nos deja la gran lección de las personas inteligentes que se entregan totalmente al servicio de los demás pero que en ningún momento se creen imprescindibles o insustituibles.

Deseamos que esta lección de humilde sabiduría sea valorada por quienes ejercen cualquier clase de poder, sobre todo por quienes ejercen el poder político, de modo que no se obsesionen en querer reelegirse y prolongar inconstitucionalmente sus mandatos. A veces, el deseo de permanecer en el poder, lejos de significar vocación de servicio, esconde ambición y soberbia.

Precisamente por encontrarnos de nuevo en un año muy marcado por la actividad política orientada a las elecciones generales del mes de noviembre, queremos invitar a reflexionar y profundizar en todo aquello que manifestamos en la Carta Pastoral titulada “Reflexiones con motivo del actual proceso electoral en Honduras”, y que fue publicada el 11 de Octubre del 2012.

Reiteramos que el derecho legal y el deber moral de ejercer el sufragio garantiza nuestra democracia, la cual que no deja de estar amenazada de muchas formas. Por eso, la participación ciudadana en la vida política es la fuerza que contribuye a liberar al pueblo de tantas esclavitudes a las que se ve sometido por causa de la violencia, la crisis económica, la falta de empleo, el aumento incontrolado de la canasta básica, etc.

Hemos tenido una fructífera reunión con el Tribunal Supremo Electoral y acordamos apoyarles en todo lo que conlleve guiar a nuestro país hacia elecciones transparentes y salvaguarda de la democracia.

Al iniciar este camino que es la Cuaresma, con el apóstol San Pablo, les exhortamos: “¡Déjense reconciliar con Dios!” (2 Cor 5, 20). En efecto, en Honduras necesitamos urgentemente un clima de reconciliación que nos ayude a superar divisiones y enfrentamientos que nos debilitan frente a nuestros verdaderos enemigos: la corrupción, la injusticia, la mentira, el abuso de poder, la inequidad, la impunidad, la incomprensión, la marginación, el empobrecimiento y todo lo que podríamos vencer si viviéramos unidos y reconciliados.

También damos gracias a Dios por haber proveído con un nuevo Obispo a la Diócesis de Choluteca. Monseñor Guido Charbonneau, PME, recibirá el ministerio episcopal el día 20 de abril en la ciudad de Choluteca. Pedimos oraciones para que el Señor lo ilumine y fortalezca en su misión pastoral.

Nos sabemos acompañados en todo momento por la maternal intercesión de la Madre del Señor Nuestra Señora de Suyapa, cuya fiesta hemos vivido como una multitudinaria expresión de cariño del pueblo hondureño hacia ella.

Agradecemos al Congreso Nacional y al Gobierno de Honduras que, por el Decreto N°. 188-2012, haya declarado el día tres de febrero, Día Festivo Nacional, en honor a la Virgen de Suyapa.

Ella, como Madre, nos llama incesantemente a la unidad y a vivir como hijos e hijas de Dios. Le suplicamos que,en el camino de la Cuaresma, nos ayude a seguir a su Hijo Jesucristo y permanecer al pie de la Cruz, sabiendo que el Amor es más fuerte que la muerte.

 

Comayagüela, 13 de febrero de 2013.

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